El periódico “Diario de Yucatán”, en su versión digital de fecha 8 de enero de 2009, publica sobre un trabajo de investigación que realizan de manera coordinada Ecosur y la Universidad Autónoma de Campeche, sobre la situación que guarda la producción artesanal del Municipio de Calkiní, según los investigadores, encabezados por el Mtro. Luis Ariel Manzanero Acevedo, al menos 2,215 familias dependen directa o indirectamente de la elaboración y venta de artesanías.

De acuerdo con los trabajos de investigación, que aún no concluían a la fecha de la publicación, el panorama que vislumbran no es nada halagador, ya que muestra una decreciente producción y comercialización de los productos, señalan entre las principales causas: la escasez de materias primas, la existencia de productos sustitutos y el poco valor que se da a la mano de obra y al esfuerzo de los artesanos.

Al concluir el proyecto de investigación “Importancia económica de las artesanías en familias del municipio de Calkiní, Campeche, México” los investigadores darán sus recomendaciones para apoyar la sustentabilidad económica de las artesanías en esta zona.

Sin ser experto y con el único afán de contribuir, con una modesta opinión, a la búsqueda de alternativas de solución al problema expuesto, que debe ser motivo de preocupación de nuestras autoridades pero también de toda la sociedad calkiniense, por todo lo que las artesanías representan, tanto en la economía como en la identidad cultural de nuestro terruño.

Es probable, que a esta fecha, estas sugerencias estén ya contempladas en el trabajo de los expertos, de otra manera, espero que de algo puedan servir las expresadas en este artículo.

A las causas expuestas por los investigadores, sugiero considerar, entre otras: El diseño de modelos innovadores, el perfeccionamiento de las técnicas de elaboración y la comercialización de los productos.

Con respecto al primero, sin dejar de reconocer de que muchos de nuestros artesanos hacen un esfuerzo por presentar nuevos diseños, más al gusto de los actuales consumidores, un gran número de productos artesanales se han mantenido inalterados y ya no satisfacen los gustos de la sociedad contemporánea o no responden a las necesidades actuales, quedando en desuso o desplazados por nuevos productos, como atinadamente señalan los investigadores, de ahí la importancia que guarda el aspecto del diseño de productos innovadores o de la transformación de los ya existentes. Un caso positivo que puede servir de ejemplo, es la producción de los sombreros de la palma del jipi y de los diversos artículos confeccionados con ese material, que elaboran los pobladores de Bécal, que se han ido modernizando al incluir nuevas técnicas y nuevos modelos en sus productos. La capacitación y el intercambio con artesanos de otras latitudes han rendido frutos, en el caso becaleño, algo similar habrá que realizar con los productores de las otras artesanías.

A través de este tipo de actividades además de resolver lo relativo al diseño se puede llegar al perfeccionamiento de las técnicas de elaboración artesanal, se trate de sombreros, como de aditamentos al vestuario, ropa artesanal, alfarería, urdido de hamacas, petates, cestería, cerámica, tallado en madera, tallado en madera, conchas y productos marinos y otras que ocupan a nuestros artesanos.

Aunado al diseño innovador y al perfeccionamiento de las técnicas de elaboración habrá que considerar como de igual importancia la comercialización de los productos. Se hace necesario contar con los espacios de venta adecuados, promover y apoyar la participación de los artesanos locales en ferias o eventos de esta naturaleza, tanto a nivel local como regional y nacional y en centros de atracción turística, para acercar a los productores de los posibles demandantes de sus obras, mayor difusión a la producción artesanal y de la riqueza cultural y natural con que cuenta el municipio de Calkiní, así como el de establecer contactos con centros de distribución que se interesen en la comercialización.

Tomando en cuenta lo variado de nuestra producción artesanal y el gran número de familias que de ella dependen, valdría la pena considerar la oportunidad de crear, con apoyo institucional, una escuela de diseño artesanal, a nivel técnico o de licenciatura, que dé oportunidad a los jóvenes de nuestro medio de hacer una carrera profesional y de esta tradición, un medio de vida sustentable, como lo hacen otros tantos lugares de nuestro país. Taxco, Guerrero, cuenta con una escuela de diseño de orfebrería en plata. Tal vez el Instituto Tecnológico Superior de Calkiní, el ICAT o el CBETI, Unidades Calkiní, o el CONALEP Plantel Dzitbalché puedan implementar entre sus carreras una acorde a este propósito, tan ligado a nuestras tradiciones y a nuestra cultura, de no ser posible a través de estas instituciones, el Municipio debe pugnar por la creación de una institución que atienda esta necesidad.

Cabe señalarse que el Gobierno del Estado y el Municipal en diversas épocas han realizado acciones con este propósito, la capacitación a los artesanos de Tepakán, en cerámica, por el año de l970, que tuvo poco impacto en cuanto al diseño de sus productos, la experiencia positiva de la capacitación a los sombrereros de Bécal y el Parador Turístico construido recientemente para la comercialización de sus productos, son algunas de ellas, pero que sin duda no han sido suficientes para abatir el decremento en la producción artesanal.En años pasados a la vera de la carretera que comunica las ciudades de Mérida, Yuc. con la de San Francisco de Campeche, en el Barrio de Guadalupe de esta ciudad de Calkiní, se construyó un Parador Artesanal, que no cumplió con sus propósitos, quiero atribuir el fracaso a estos hechos: un mal diseño de la obra, nula visibilidad a distancia, carencia de señalización y espacios de desaceleración, tomando en cuenta de que es una vía rápida, ubicación de los espacios comerciales de manera transversal a la carretera. El ejemplo del Parador de San Francisco Kobén, en el municipio de Campeche, podría ser el más adecuado para el nuestro.

Por lo anteriormente expuesto, será de gran valía para nuestro municipio los resultados que arrojen el trabajo de investigación que realizan Ecosur y la UAC, esperemos que sus recomendaciones, y algunas de las aquí expuestas, sean tomados en cuenta por los propios productores y de ser viable pasen a formar parte de los programas de desarrollo de nuestras próximas autoridades municipales y estatales.