El padre Fernando, de rodillas ante el altar y el Obispo, hizo su revocación de fe como sacerdote, ser un guía y pastor para el pueblo de Calkiní.

En su mensaje, el pastor de la grey campechana destacó: Acompañado de sacerdotes, seminaristas, padre Fernando  llegas a esta parroquia en un día muy especial: en el Día de las Madres, recordando las palabras del evangelio de San Juan donde viene el discurso de Jesús sobre las características del buen pastor. El Papa Francisco firmó un documento, "apacentar el rebaño del Señor"; de una manera responsable, debes llevar adelante esta misión.

Llegas a una parroquia grande, tradicional, que fue un foco de evangelización desde ya casi  500 años, de estructura grande tradicional austera en su ornamentación, firme en su consolidación y grandiosa en sus dimensiones. Calkiní ha sido cuna de vocaciones; ha dado 4 sacerdotes y próximamente se ordenará otro. Además, de aquí salió el primer obispo del clero campechano; un hijo de aquí, después de 126 años de existencia como diócesis, un hijo de esta parroquia fue designado por el Papa Francisco... un hijo de esta tierra (fue designado a) servir en el estado de Veracruz.

Padre Fernando, aquí has estado en el campo de las  vocaciones; hoy llegas a esta ciudad como párroco, llegas con más experiencia, más tablas para apacentar las ovejas del Señor, de Jesús. Ahora, los tiempos son más difíciles; la pandemia ha dejado grandes secuelas en todo, los dolorosos fallecimientos que fueron bastantes... ahora, Padre, tiene que dar esperanzas al pueblo, llevar como el Buen pastor las ovejas, que se han separado.

San Luis Obispo, la Virgen María, el Señor de la Misericordia, te acompañaren y protejan siempre al igual que la oración de todos, para ejercer tu ministerio y conducir al pueblo de Dios; el pueblo somos todos y el pueblo es de Dios. Debemos perseverar y ser responsables para el crecimiento, para consolidación de la Iglesia de Dios.

El Obispo llevó al nuevo párroco hacia el Bautisterio e hizo entrega del mismo. Ya en el altar mayor le hizo entrega de las llaves del Sagrario y del altar de celebraciones; para verificar esto, dos testigos firmaron una libreta.

El nuevo párroco emitió su primer mensaje al pueblo: He llegado a esta comunidad parroquial a quien espero servir a ejemplo del Señor, con generosidad continuar con la buena labor que han hecho los anteriores padres; con el apostolado de los grupos, apoyar a los jóvenes en su formación espiritual; retomar los objetivos de esta pandemia que nos ha hecho una pausa, en este caminar... Con la alegría de Dios, vamos a superar poco a poco esta situación.

El caminar de esta parroquia muy viva, con muchos frutos juveniles, apoyo a las madres Clarisas que forman parte de este convento; servir con generosidad, al igual la atención pastoral a las capillas, con la ayuda de Dios y el padre Ricardo, al igual con los del seminario para servir a esta iglesia de San Luis Obispo. Espero la participación de los coordinadores de grupo, los encargados de capillas, así como los ministros de la Eucaristía, catequistas; con todos, retomar  las misas a partir de mañana a las 8 de la mañana y por la tarde; y, posteriormente, retomar la adoración perpetua del Santísimo; claro, con la disposición de todos.

Agradezco el recibimiento de anoche. Quien encuentra un amigo tiene un tesoro, eso es para mí el padre Juan, servir con generosidad y entrega a esta comunidad. muchas gracias.

Sacerdotes que asistieron a esta ceremonia: Sergio Hernández, Mario Haas, Ponciano Can Naal, Juan Eliodoro Kantún Huchim, Ricardo Partida Contreras, Manuel May, Jorge Leopoldo Escalante (Ciudad del Carmen), Eduardo Martín Pacheco, Ramón Valladares Collí (Diácono), Vicente Góngora, Daniel Noz y el Obispo de Campeche. Al finalizar la misa, los concelebrantes posaron para la foto del recuerdo.