Calkiní, 4-5 de julio de 2003
 
Ceremonia de Graduación de la Generación 1999-2003
 

Local de la Sociedad "Aurora". 21:26 hrs.:

Las 28 graduantes de la Escuela Normal de Licenciatura en Educación Preescolar, sentadas en sillas cubiertas con telas blancas y orladas con lazos rojos -semejando butacas-, vieron subir a los funcionarios de los sectores educativo y civil, que presidirían la ceremonia de graduación de la Generación 1999-2003 "Prof. Jorge Rodríguez Flores".

 
Las graduantes
 
 
La Profa. María Lucrecia Flores Pacho anunció el inicio del programa. Primero, un mensaje, dedicado a las aún alumnas de la ENLEP "Prof. Pastor Rodríguez Estrada"; luego, la presentación de autoridades y personalidades: Br. Sonia Cuevas Kantún, Presidenta Municipal; y profesores Luis Cortés Mijangos, Srio. Gral. de los maestros estatales, Cecilia Castellanos Castellanos, Presidenta del DIF Municipal, y María Angelina Berzunza Chacón, Supervisora de la Zona 017 de Educación Preescolar.
Parte del presidium

También formaron parte de la mesa de honor, los mentores Cecilio Chan Balán, Director de la ENLEF, Carlos Rodríguez Sánchez, Director de la ENLEE, Alberto Rodríguez Flores, Subdirector Administrativo de la ENLEP (de Primaria), Alonso Reyes Pinto, Coordinador del Centro de Maestros No. 1, y Jorge e Isabel Rodríguez Flores, maestro y Directora, respectivamente, de la institución organizadora del evento.

En uno de los asientos delanteros, ubicados en el costado izquierdo del salón principal, el Prof. Pastor Rodríguez Estrada, escuchó su nombre, gratamente reconocido por profesionistas de la educación, y gente de diversas partes del país.

 
Prof. Pastor Rodríguez Estrada
 
 

La segunda mujer, de cinco, en hacer uso del micrófono -la primera fue la Profa. (Malú) Flores Pacho- fue la Profa. Isabel, quien en discurso de dos cuartillas señaló que "La generación que hoy egresa tiene la especial característica de ser la primera del plan de estudios 1999.

"Este plan estudios revolucionó el quejacer del plantel, pues tanto maestros como directivos nos vimos en la necesidad de cambiar estrategias didácticas y de organización, para cumplir con la misión de la escuela.

El Prof. Jorge Rodríguez Flores acompaña a 14 alumnas
 
 

"Reconozco la decisión de la generación que egresa de llevar el nombre del profesor Jorge, pués él ha sido el pilar más fuerte en la aplicación de este nuevo plan de estudios y no ha escatimado esfuerzos por interpretarlo y dar impulso a la formación de nuestras alumnas. (...) Gracias maestro Jorge."

Al final de su discurso, la maestra Chabelita -como cariñosamente le llaman-, pidió a las jóvenes graduantes:

Profa. Raquel Isabel Rodríguez

"Hoy dejan nuestra escuela, emprendan el vuelo con la seguridad de que los conocimientos que sus maestros les inculcaron harán que se desempeñen profesionalmente.

"Que su ánimo nunca decaiga ante los obstáculos que encuentren a su paso, que el éxito se manifieste en todas las acciones que emprendan. Mis felicitaciones y nunca olviden que la escuela que hoy les ve partir siempre será de ustedes."

De una en una, las educadoras fueron llamadas y subieron al escenario del teatro "Briceida Cuevas", donde las autoridades les entregaron sus constancias de haber concluido sus estudios.

Las pasantes en educación preescolar, hicieron el recorrido acostumbrado en este tipo de ceremonias: De un brazo de sus padrinos de graduación caminaron hacia los escalones del teatro. Al subir, las esperaban los funcionarios; una autoridad entregó el papel (documento), mientras un fotógrafo (en turno) imprimía su placa.

Se vio a Luis Acosta, "Alpha", y a otros lentistas turnarse en los "flashes"". En el mismo momento, otra educadora subía al estrado a repetir el mecanismo. Abajo, los padrinos tomaban la mano de sus ahijadas para que éstas bajaran los escalones, y el fotógrafo Aragón guardaba las imágenes del recuerdo en su cámara.

 
El Prof. Luis Cortés entrega una constancia a Jazmín González
Fotografía del recuerdo
 
 

Luego, Zazil Cih Arcila se dirigió a sus compañeras, con las siguientes palabras: "Debemos estar convencidas que la profesión que elegimos va a llenarnos de satisfacciones siempre y cuando nosotras hagamos nuestro trabajo con verdadera vocación y entrega. Ser educadoras implica una gran responsabilidad, ya que de nosotras va a depender el desarrollo integral y el futuro de los niños a los que estemos a cargo. Debemos darle la verdadera importancia a este nivel educativo, pues como bien sabemos en él se adquieren los aprendizajes más significativos que forman la personalidad de cada uno de los niños".

Zazil se dirige verbalmente hacia sus compañeras
 
 

La alcaldesa hizo uso de la palestra para hablar de la emoción de las muchachas que egresaron hoy, de un centro educativo que las apoyó en su formación profesional, al igual que sus padres.

Agradeció profundamente a quienes hicieron posible la culminación de las 28 nuevas educadoras. Como siempre, Cuevas Kantún no escribió ningún discurso, pero resaltó su preocupación por el desempleo de los profesionistas. También, como lo ha hecho en otras ocasiones, mencionó su despedida temporal, tiempo que ocupará -dijo- en busca de alternativas para solucionar el problema del desempleo.

 
La alcaldesa, Br. Sonia Cuevas Kantún, durante su intervención
 

La joven Rossana Vela Uribe declamó el poema "Maestrito de pueblo", y minutos antes de que concluyera la ceremonia (a las 22:19 hrs.), un par de niños entregaron plantitas en macetas a las graduantes, en el momento en que la alumna Luz Elena Hernández Loeza, oriunda de Chetumal, Quintana Roo, leyó "Palabras de despedida", que se resumen a continuación:

"Podemos entender que cultivar es dar a las plantas los cuidados necesarios para crecer y fructificar; pero también se puede entender desde la perspectiva del nivel preescolar por desenvolver, ejercitar el talento u otras facultades, en los pequeños, abrirles las puertas de un medio adecuado y darles lo necesario para mantenerlos vivos en constante interacción con lo que les rodea.

"Esta es la verdera labor de nuestro trabajo, la cual se debe basar en el "amor", que significa generosidad, respeto, comprensión, honestidad y tolerancia. Implica saber que los niños desde su nivel de madurez son conducidos con paciencia por el camino que les permita ser miembros eficaces del lugar en el que habitan".

Finalizó la velada, diciendo: "El reconocimiento no es el salario que percibirás, no es el que todos te admiren, no es el que hoy se les otorga, el verdadero reconocimiento lo obtendrán de sus alumnos por su respeto, por su atención, por su transformación, porque les digan 'Gracias maestro'. Muchas felicidades y éxito en lo que se propongan".

 
Izq. Rossana Vela Uribe declama "Maestrito de pueblo". Der. Luz Elena Hernández lee un mensaje
 
 
Texto y fotos: Santiago Canto Sosa.