Calkiní, 16 de abril de 2010
 
"La Sociedad Cultural 'Aurora' de Calkiní": Texto de Alonso Reyes Cuevas
 

Distinguida concurrencia:

La Sociedad Cultural "Aurora" está cumpliendo 83 años de su existencia. Una larga vida.

El libro que esta noche presentamos, abriga en su seno, la historia de ella, desde sus inicios hasta cumplidos sus 80 años. Quienes se interesen en saber algo de esta agrupación dedicada al cultivo de la cultura en algunos de sus diversos campos, podrán encontrar en las páginas de “La Sociedad Cultural 'AURORA' de Calkiní”, que es el nombre del libro, la información requerida.

Participación del autor del libro, Alonso Reyes Cuevas
 

Estoy en el entendido que no todo lo hecho, ni todos los acontecimientos que esta Sociedad organizó a lo largo de su existencia fueron asentados. Es posible que muchos de ellos hayan escapado a nuestra investigación; pero sí se registran aquellos que se consideraron de mayor relevancia. Por fortuna, en los archivos de la Aurora se conservan los libros de Actas y Acuerdos, en los que se registra el hacer de los socios auroristas, desde el día de la fundación de la agrupación el 3 de abril de l927. Estos libros fueron la fuente más importante que tuve a mi alcance y que me permitió escribir esta historia que era ya un reclamo para que la memoria de la Aurora no se extraviara con el paso de los años. También para que los que de alguna manera dieron algo de si para ella conserven un documento que recordara sus pasos por los senderos de esta agrupación cultural y desde luego para que las nuevas generaciones sepan que la Sociedad Cultural Aurora nació y desarrolló su fructífera vida al impulso de las inquietudes creativas juveniles en aquellos lejanos ayeres de las primeras décadas del Siglo XX.

Siempre caminó a la vanguardia de los programas socioculturales y deportivos de Calkiní y hasta hoy en la primera década del actual Siglo XXI, la Aurora se esfuerza por poner su granito de arena para que la cultura de este pueblo al que un día se le llamó ”La Atenas del Camino Real” prevalezca en el grupo de los pueblos más cultos de Campeche.

Este modesto trabajo que hoy ponemos a la consideración de ustedes es mi homenaje a la “Aurora”, a la que he servido con una gran emoción desde los años de mi juventud, en l953, en que fui aceptado como socio activo de ella.

En la composición de este libro participaron Ex Presidentes, Ex Embajadoras y muchos socios. También colaboraron muchos amigos de la Sociedad. Todos aportaron valiosa información, por lo que, les expreso mi gratitud. Que hago extensiva al H. Ayuntamiento de Calkiní del trienio recién pasado que presidió el Profr. Jorge A. Cocón Collí en su carácter de Presidente Municipal, ya que gracias al acuerdo del Cabildo se imprimió este libro.

Acerca del contenido de la obra ha llegado a ustedes en la voz de los presentadores: Mis hijos Alonso y Lizbeth Marlene Reyes Pinto, a quienes felicito emocionado por lo bien que lo han hecho.

Sin embargo, considero de justicia tributar un homenaje a quienes, en sus años jóvenes fundaron la Sociedad Aurora de Calkiní y cuyos nombres figuran en las páginas del libro: Fernando Baeza García ideólogo y Primer Presidente, Isauro Herrera, José del C. Cuevas Sierra, Juan Berzunza Herrera, Andrés Alpuche Herrera, Jorge Abuxapqui Adam, Rodolfo Rodríguez Cuevas, Efraín Pérez Rodríguez, Tomás Casanova Quintero, Trinidad Blanqueto H. Después de ellos, llegaron otros jóvenes, muchos hombres y mujeres más que con inusitado entusiasmo brindaron a esta sociedad cultural la fortaleza y el esplendor que ha permitido su reconocimiento tanto dentro de nuestro país como más allá de sus fronteras. Todos ellos son merecedores de nuestro reconocimiento y respeto. Sembraron los cimientos para que la Aurora disfrutara de una larga vida que aun no termina, sirviendo siempre al fomento de la vida cultural de Calkiní cuna de su nacimiento.

Quiero terminar mi intervención agradeciendo al Profr. Isauro Herrera Blanqueto la conducción del Programa. De igual manera a la actual Directiva que con tanta animosidad conduce el Met. Fernando Rodríguez Ortegón. También agradezco a todos los que hicieron posible la realización de este evento cultural. Y a los que con su presencia le dieron mayor realce. A mis amigos Maestros Jubilados. Al Cronista de la Ciudad, Profr. Santiago Canto Sosa.

Y, abusando de la bondad de los presentes quiero significar la presencia de mis hijos acompañados de sus esposas o de sus esposos, la de mis nietos, niños y niñas, y de mi primer bisnieto, que por allá andan correteándose en los salones de la Aurora.

Permítaseme un último pensamiento a la Sociedad Aurora en sus 83 años de vida.

AURORA, tú eres como el verso de una romántica canción cuando dice:

“Un viejo amor, ni se olvida ni se deja. Un viejo amor, de nuestra alma sí se aleja, pero nunca dice adiós“.

En los auroristas ese romanticismo ha prevalecido a través del tiempo en sus emociones y en el espíritu que los ha unido a lo largo de tantos años. Quienes un día se alejaron, nunca han dicho adiós a la Aurora y sí guardan de ella inolvidables y gratos recuerdos. Es como un viejo amor que ni se olvida ni se deja.

Gracias por el honor de su atención.

 
 
 
 
Fuente: Texto proporcionado por su autor / Fotos: Santiago Canto Sosa